El sirope de yacón es un edulcorante natural proveniente de Sudamérica. Se obtiene de las raíces de un tubérculo llamado yacón que crece en los Andes de Perú.
Los incas ya la usaban y hoy en día los peruanos comen yacón por sus propiedades nutricionales. En Bolivia comen sus raíces las personas con diabetes o con trastornos digestivos o renales y en Brasil se usa para fabricar té de yacón, que se considera antidiabético.
El sirope de yacón contiene un 47% de fructooligosacáridos, un 20% de sacarosa, un 7% de fructosa, un 3% de glucosa y un 1% de proteína. El resto sería agua. Tan solo contiene 1,5 calorías/g (frente a las 4 del azúcar) y su índice glucémico es de sólo 1 (vs. 65 del azúcar común).{alertInfo}
Las cantidades de FOS (fructooligosacáridos) y de fructosa del sirope de yacón dependen de su método de cultivo, época de cosecha y condiciones de almacenamiento. Su sabor es parecido al de la melaza o el azúcar caramelizado.
¿Cuáles son las ventajas del sirope de yacón? El gran contenido en fructooligosacáridos del yacón resulta muy beneficioso para nuestro organismo ya que no se digieren al completo y nuestro cuerpo los trata como fibra. En nuestro intestino sirven de alimento a las bifidobacterias del colon, fomentando la flora saludable, por lo que el sirope de yacón se considera un alimento prebiótico. {alertSuccess}
¿Cuáles son los inconvenientes del sirope de yacón? Hay que tener en cuenta que un consumo elevado de inulina (en la cual es rica el sirope de yacón) puede dar lugar a gases o diarrea. No se recomienda consumir más de 5 cucharitas de sirope de yacón al día. {alertWarning}
Más que como edulcorante, el sirope de yacón, bastante desconocido por estos lares todavía, se usa como suplemento.
